Como no estuve posteando con regularidad ultimamente, voy a subir algunos trabajos de interés mediato.

Este artículo presenta una evaluación bastante realista de la relación crecientemente problemática de la administración Obama con sus vecinos continentales del Sur, aún desde una perspectiva derechista. Desde otra perspectiva podría decirse que la actuación norteamericana en Honduras hizo caer la máscara del discurso edulcorado de hace unos meses y mostró el rostro de la misma vieja política de defensa de los intereses corporativos.


El otro signo de la tendencia actual lo dio la reciente gira del Subsecretario de Asuntos Hemisféricos (el chileno de nacimiento con el peinado inexplicable) Arturo Valenzuela, quien no pudo estrechar las manos de ningún presidente relevante de la región.
En Argentina sus declaraciones públicas sobre la "falta de seguridad jurídica" para las inversiones extranjeras levantaron una ola de críticas. Estas declaraciones estaban vinculadas al prolongado conflicto del gigante de la alimentación Kraft Foods Corp. contra sus trabajadores y las leyes laborales existentes. Si bien el conflicto se inició en Julio por el incumplimiento de las medidas de seguridad por la Gripe A, era la culminación de una prolongada tensión causada por la presión de los gerentes de la fábrica de galletitas Terrabusi (perteneciente a la corporación) por disminuir el personal y extender los turnos de trabajo. La empresa despidió a cientros de obreros y a todos los delegados electos.
Los meses siguientes vieron una serie de movilizaciones por la reincorporación de los despedidos, con cortes de la autopista cercana al establecimiento y choques entre la policía y estudiantes de izquierda que los apoyaban.
Al final, la empresa se vio presionada por los funcionarios y jueces laborales a ceder y reincorporar a los despedidos. Fue una clara muestra de la lucha de clases en el marco de la legalidad burguesa ante una ofensiva del Capital por transgredirla.

La Ley prevaleció, que es más de lo que puede decirse que pasó en el resto del Mundo en medio de la mayor crisis capitalista en casi un siglo. A eso el enviado de Obama lo considera "inseguridad jurídica" para los inversores extranjeros, quienes parecen ser los verdaderos electores (constituency)  a proteger por su gobierno. No es de extrañar, pues, que en el futuro encuentre cada vez más problemas en el vecindario.


El pueblo chileno está eligiendo hoy a sus gobernantes y el multimillonario Sebastián Piñera (dueño -entre otras empresas- de la aerolínea de bandera) parece estar piloteando cómodamente la primera vuelta. El descolorido demócratacristiano Eduardo Frei y el "rebelde" socialista posmoderno Marco Enríquez-Ominami disputan el privilegio de entrar como opción en la segunda vuelta.


Cualquiera sea el resultado final lo que es seguro es el camino irreversible del país hacia la inmersión en el liberalismo capitalista global. ¿Puede un país con bases industriales endebles (la renta nacional sigue dependiendo básicamente de la exportación de cobre) desarrollarse exitosamente de este modo?. Por un tiempo pudo parecer así por la incorporación de aspectos modernizantes externos (cambios edilicios, organización empresarial). Pero otras experiencias recientes (Irlanda, Islandia, incluso España) han mostrado los riesgos de esta vía.

Esta ilustración acompaña una nota con las opiniones de sociólogos chilenos sobre lo que se viene. También es recomendable leer esta subnota con los cambios cuantificables ocurridos en la sociedad chilena durante los últimos veinte años.


 Ahora que este personaje que parece salido de "Conversación en La Catedral" de Vargas Llosa (sí, ya sé que el escritor también) va a tener oportunidad de explayarse verborrágicamente por todos los micrófonos, me pareció oportuno rescatar esta antigua ilustración para que quede a disposición de todos los blogueros a los que les venga bien. Que lo disfruten.